“Con la pérdida de independencia judicial pues también se va a perder la imparcialidad de los juzgadores, y es muy probable que el partido en el poder le sea muy difícil que vaya a perder casos”, agregó.
Los hallazgos se presentaron el domingo en la reunión anual de la ASCO en Chicago y fueron publicados por el New England Journal of Medicine. Grupos de investigación académica en Canadá, Australia y el Reino Unido financiaron el trabajo.Los investigadores siguieron a 889 pacientes con cáncer de colon tratable que completaron la quimioterapia. A la mitad se les dio información para promover el ejercicio y la nutrición. Los otros trabajaron con un entrenador, reuniéndose cada dos semanas durante un año, y luego mensualmente durante los siguientes dos años.
Los entrenadores ayudaron a los participantes a encontrar formas de aumentar su actividad física. Muchas personas, incluida Terri Swain-Collins, optaron por caminar durante unos 45 minutos varias veces a la semana.“Esto es algo que podía hacer por mí misma para sentirme mejor”, dijo Swain-Collins, de 62 años, de Kingston, Ontario. El contacto regular con un entrenador amigable la mantenía motivada y responsable, añadió. “No quería llegar y decir, ‘no hice nada’, así que siempre estaba haciendo cosas y asegurándome de completarlas”.Después de ocho años, las personas en el programa de ejercicio estructurado no solo se volvieron más activas que aquellas en el grupo de control, sino que también tuvieron un 28% menos cáncer y 37% menos de muertes por cualquier causa. Hubo más distensiones musculares y otros problemas similares en el grupo de ejercicio.
“Cuando vimos los resultados, quedamos asombrados”, dijo el coautor del estudio, el doctor Christopher Booth, médico oncólogo en el Centro de Ciencias de la Salud de Kingston en Kingston, Ontario.Los programas de ejercicio pueden ofrecerse por varios miles de dólares por paciente, dijo Booth, “una intervención notablemente asequible que hará que las personas se sientan mejor, tengan menos recurrencias de cáncer y vivan más tiempo”.
Los investigadores recolectaron sangre de los participantes y buscaron pistas que vinculen el ejercicio con la prevención del cáncer, ya sea a través del procesamiento de la insulina, el fortalecimiento del sistema inmunológico o algo más.
El programa de entrenamiento de Swain-Collins terminó, pero ella sigue haciendo ejercicio. Escucha música mientras camina por el campo cerca de su casa.— The growing impact of billions of dollars in opioid lawsuit settlement money.
— The number of at-risk Americans is shrinking, after waves of deaths in older adults and aand younger adults away from the drugs that cause most deaths.
Still, annual overdose deaths are higher than they were before the COVID-19 pandemic. In a statement, the CDC noted that overdoses are still the leading cause of death for people 18-44 years old, “underscoring the need for ongoing efforts to maintain this progress.”Some experts worry that the recent decline could be slowed or stopped by reductions in federal funding and the public health workforce, or a shift away from the strategies that seem to be working.